Veas-01 no es un meteorito en estricto sentido
Hemos recibido numerosos correos electrónicos en los que muchas personas nos instan a que publiquemos un conclusión final sobre Veas-01, al tiempo que nos presionan para que digamos claramente que Veas-01 es un Meteorito, y que no sigamos hablando de una Extraña Roca o un Piedra de seis toneladas y de Curiosas Características. Entre dichos correos hay quienes nos señalan, y no sin buenas razones, que el hecho que existan Aluminosilicatos no clasificados, escructuras petreas con tamaño de grano inusualmente grandes para ser terrestres, la presencia de sulfuros de Fe en su forma Troilita, y otras inclusiones atípicas, serían un patente indicador de un orígen extraterrestre.
Recientemente la empresa Gerdau Aza, filial chilena, ha manifestado su interés en fotografiar y conocer de datos adicionales que puedan ser resaltados de Veas-01, en particular la estructura de su acero y su magnetismo.
No obstante, el problema de sustantivar Veas-01 no es tan simple como le puede parecer a varios de nuestros amables lectores. Para certificar que una estructura como la Piedra Veas-01 se trata en verdad de un Meteorito, es imprescindible primero clasificarla. Y la clasificación no ha sido sencilla por diversas razones. He aquí que exponemos suscintamente cuatro (4) motivos que justifican nuestro accionar de no calificar ni adjetivar Veas-01:
Razón 1: salvo el artículo publicado en 2003 por el polaco Andrzej Kotowiecki y puesto en este Blog, hasta la fecha no existe meteorito metálico o siderito alguno que luego de haber sido analizado quimicamente arroje menos del uno porciento de Ni. No se ha descrito en la literatura científica, ni se ha conocido hasta el presente trozo meteorítico que no presente al menos un 4 o 5 porciento de Ni. De este motivo se desprende que, al no poder clasificar Veas-01 de acuerdo a la tabla conocida para Sideritos, Lititos o Siderolitos, se debe rechazar en principio que se trate de un Meteorito, según los estrictos cánones establecidos para ello.
Razón 2: La presencia de Melilita y Monticelita en la costra pétrea que tiene la gran Piedra Veas-01, además de olivinos, piroxenos y un par de aluminosilicatos no clasificados con grano de gran tamaño, pueden ser argumentos para clasificar la corteza como perteneciente a la clasificación de Condritas (un tipo de meteorito). No obstante, respecto del metal, si bien se ha detectado en él la Troilita como inclusiones y (Fe,Mn)S, que en su forma de Niningerita, han sido ampliamente descritas en meteoritos, el problema subyacente es que el metal, o más bien la estructura del metal del que se compone Veas-01, se asemeja más bien a un acero de bajo carbono fabricado con tecnología que al fierro que típicamente se observa en los sideritos. Así lo demuestran los siguientes comentarios formulados por cinco (5) distintos especialistas:
A.- Noviembre 2003.
"I take a look in a scanning microprobe, and the low Ni argue for this Rock man-made origin, not as a meteorite". Michael Zolensky. Code ST. NASA Johnson Space Center. Houston, TX 77058.
B.- 24 diciembre 2003.
"Hi Guys!. It’s not a meteorite amigos. It’s iron- but that’s it: Slag. Have a good X-Mas anyway!. Peace on Earth". Robert Haag. The Meteorite-Man. P.O. Box 27527, Tucson, AZ 85726. Ph: 520.882.8804. web site: www.meteoriteman.com
C.- 9 de marzo de 2004.
"I can say with confidence that this material (Veas-01) is not meteoritic and is almost certainly industrial in origin, as you seem to have ascertained from your earlier analyses. Unfortunately, I and my colleagues are not qualified to comment on the specific mechanism by which this material may have been produced". Tim McCoy and Linda Welzenbach. Curator-in-Charge. Div. of Meteorites. Smithsonian Institution. National Museum of Natural History.
D.- Abril de 2005.
"We now did electron microprobe analysis on some polished sections. Regretfully, it turned out that the nickel content was in between 560 and 1600 ppm only. This rules out any extraterrestrial origin of this sample, in spite of the Widmanstaetten fabric. I then contacted a metallurgist at our university, and it turned out that micro-Widmanstaetten fabrics are common feature of low-C steel. The meteoritic Widmanstaetten fabric has a bandwidth of more than 0.1 mm, which I was not aware of before. The bandwidth observed in your samples is typical of austenitic steel. I also talked to a specialist in meteorites. There is no hope for your sample being an iron meteorite. The nickel content is just much too low". Bernd Lehmann. Technical University of Clausthal. Germany.
E.- Mayo de 2005.
"The VEAS-01 Iron Rock presents characteristics which are not consistent with any known rock types in Chile, discarding a possible terrestrial natural source. The pure iron portion of this rock shows some characteristics which are compatible with some types of industrial steel as well as being compatible with iron – rich meteorites. Low Ni concentrations in pure iron is though a strong argument against an extraterrestrial origin, yet many other characteristics are highly compatible with siderolites, such as FeS blebs (possible troilite). Melt crust mineralogy is compatible with both, industrial steel slag and with iron – rich meteorites, yet equigranular millimetric size texture argues against a possible anthropogenic origin. Fayalite and monticellite are known to occur in iron – rich slag, but not with an equigranular faneritic texture. Crystalline texture of both pure iron (hexagonal) and melt crust, melt crust mineralogy and leucite intracrystalline filling, are suggestive of a high temperature (more than 1600° C) slow crystallizing process, not expected for industrial steel, much less for slag. Some other characteristics of this rock such as an extremely variable and local magnetic field, temperature dependent conductivity, and surface features such as thumbprints, argue for a possible extraterrestrial origin". Dr. Brian K. Townley and Dr. Mauricio Belmar. Departamento de Geología. Universidad de Chile.
Razón 3: Si analizamos estrictamente la composición química del acero de Veas-01, y nos focalizamos en la estructura de su grano de austenita (ver artículos anteriores publicados en este Blog) los especialistas no han podido determinar el proceso por el cual este acero fue en verdad formado. Cómo es posible entonces que esta masa de acero de más de seis toneladas haya permanecido por décadas en una comuna de Santiago de Chile, sin que hasta la fecha se pueda establecer cómo llegó a dicho lugar. El acero de Veas-01 no ha podido ser clasificado. Unas semanas atrás la siderúrgica subsidiaria chilena de Gerdau Aza, por medio de su Gerente de Marketing, Sr. Jorge Manriquez Pimentel, ha tomado contacto con nuestra oficina en su interés por el acero que constituye Veas-01.
Razón 4: De acuerdo con el artículo publicado en este Blog por el Físico, Ingeniero Físico y académico de la Universidad de Chile, Sr. Jorge Reyes Molina, no existiría un único momento magnético en la Roca Veas-01. De las imágenes en Autocad por él preparadas, se observa una distribución de multipolos, cuyas magnitudes y direcciones además se modifican aparentemente con la temperatura. Si esta roca tuviese una formación terrestre o natural, es claro que su momento magnético M sería único y estable.
Todas las cuatro razones antes esgrimidas explican el prudente accionar que hemos tenido antes de calificar esta roca. Por ello, y mientras no se hayan completado uno a uno los análisis correspondientes, sería irresponsable por nuestra parte el efectuar aseveraciones que puedan llevar a confusión o a malas interpretaciones. Como científicos debemos considerar los datos e informes proporcionados antes de emitir una opinión certera. Así, y mientras no completemos todas pruebas que hemos estipulado, Veas-01 seguirá siendo una Rara y Extraña Roca de Seis Toneladas, o bien, una Piedra con Curiosas Características.